MADRID, 16 de agosto. (PRENSA EUROPA) –
Al menos un militar colombiano murió y otros cuatro resultaron heridos este miércoles tras un ataque con explosivos por parte de un grupo armado aún no identificado contra un batallón del Ejército en el municipio de El Tarra, en el norte de Santander.
Este es el último de una ola de ataques contra las fuerzas de seguridad en los últimos tiempos. A la espera de que uno de los grupos armados que operan en Colombia asuma la responsabilidad, en esta región suele operar el frente disidente 33 de las FARC, o Los Pelusos, grupo criminal disidente del extinto Ejército Popular de Liberación.
En otro lugar del norte de Santander, se arrojaron explosivos sobre una comisaría del municipio La Gabarra, en la zona rural de Tibú. El comandante de la Policía Norte de Santander, coronel John Robert Chavarro, informó que en este caso no hubo muertos ni heridos.
El coronel Chavarro insinuó que disidentes de las FARC podrían estar detrás de estos ataques, asegurando que se trata de «represalias» por los últimos operativos de las fuerzas de seguridad en los que fueron detenidos varios miembros de este grupo armado. , colección RCN.
En las últimas semanas se han intensificado los ataques contra agentes del orden en lugares como Nariño y Cauca, donde cuatro policías fueron asesinados durante el fin de semana en enfrentamientos con grupos armados.
El presidente, Gustavo Petro, anunció que se reforzará la seguridad y recordó a todos estos grupos armados que cualquier posible negociación no puede ser objeto de hostigamiento por parte de la población civil.
