MADRID, 19 de septiembre (EUROPA PRESS)-
La compañía automovilística Volvo Cars, propiedad de Geely, anunció que fabricará su último vehículo diésel a principios de 2024 y que a partir de entonces dejará de producir todos los modelos de la compañía de este combustible, convirtiéndose en uno de los primeros fabricantes tradicionales en dejar de fabricar fabricar este tipo de motores.
El hecho fue anunciado este martes por la compañía en un comunicado en el marco de la Semana del Clima de Nueva York, en el que detalló que esta decisión deriva de la medida adoptada hace poco más de un año de abandonar el desarrollo de motores de combustión mediante la venta de su participación. en Aurobai. Ya no dedicaremos ni una sola corona de nuestro presupuesto de I+D al desarrollo de nuevos motores de combustión interna», dijo la compañía en el comunicado.
El director general de Volvo Cars, Jim Rowan, afirmó que su futuro pasa por los sistemas de propulsión eléctricos, que además son “superiores” a los motores de combustión porque generan menos ruido, menos vibraciones, menos costes de mantenimiento para nuestros clientes y cero emisiones de escape.
Estamos totalmente centrados en crear una amplia cartera de vehículos premium totalmente eléctricos que cumplan con todo lo que nuestros clientes esperan de un Volvo y que será una parte clave de nuestra respuesta al cambio climático«, concluyó.
Asimismo, la compañía destacó que esta apuesta por la electrificación es “lo correcto” y que viene motivada por el último informe sobre el balance climático global publicado por Naciones Unidas, que alertó de la urgencia climática y la necesidad de actuar.
Asimismo, Volvo ve la decisión de eliminar por completo los motores diésel a principios de 2024 como un ejemplo de lo rápido que están cambiando la industria automotriz y las demandas de los clientes ante la crisis climática.
